La seda de morera tiene una larga e ilustre historia. Se elabora en China, donde tiene una larga tradición. La seda está hecha por las larvas de Bombyx mori, la polilla doméstica. Las larvas se conocen como gusanos de seda y, en este sentido, la morera no es especial. Lo que lo hace único es la alimentación de las larvas. Para producir esta seda suave y perfecta, los gusanos de seda deben alimentarse exclusivamente de las hojas de la morera.
Un producto de élite
No hay mejor que la seda de morera. Es la seda de mayor calidad del mundo. Las hojas de morera tienen una serie de cualidades únicas que se transfieren al producto. Tienen características antipiréticas y antioxidantes. También dan como resultado un producto final uniforme y limpio. El más puro de los blancos.
Numerosos beneficios para la salud
La seda de morera es hipoalergénica y regula la temperatura. Esto no se debe a ningún tratamiento. Ocurre de forma natural, gracias a la composición química de las hojas de morera. Es una fibra proteica natural y será resistente a cualquier partícula alergénica o bacteria maloliente que intente alojarse en tus sábanas.
No sólo eso, sino que también su alto contenido en glicina (43%), que es una proteína fundamental para la salud de nuestra piel y otros tejidos corporales, contribuye de manera decisiva a nuestra salud y apariencia.
Da como resultado una cama más segura y cómoda
Además de los beneficios para la salud mencionados anteriormente, la seda de morera se sentirá mucho mejor que tus sábanas habituales. Consigue airear la humedad dos veces más rápido que el algodón, reduciendo la humedad en la cama hasta en un 50%. Porque sí, tristemente, los seres humanos sudan. Este efecto también evita el sobrecalentamiento. Al no atrapar agua, permite que nuestro cuerpo ralentice la producción de calor cuando siente que el exceso de humedad se evapora suavemente.
